Paró de llover,
...La Vecina Vampiro observaba el pueblo desde lo alto de la antena de telecomunicaciones. Había escalado la estructura durante la tormenta riesgoso a electrocutarse.
“Que maldita hambre tengo cooño…
Refunfuñaba con el
estómago vació y los todos sentidos agudizados, hasta podía sentir las microondas
de la antena.
“Mierrda! Y to el
mundo guardao en su maldita casa...”
Los colmillos le bajaron
tan fuerte que le atravesaron el labio inferior de la boca. La mujer empezaba a
convertirse en otra cosa.
Desesperada giró la
cabeza en ambas direcciones buscando sangre para cenar. Así detuvo la mirada un par de segundos en el
punto de drogas, ellos estaban abiertos, pero recordó las palabras de su vecino,
el que la convirtió…
“…no bebas drogadictos
ni gente con sangre contaminada.”
La Vecina se dio la vuelta
y observó el Océano Atlántico calculando si tendría fuerza suficiente para cazar un
delfín.
“última vé que me pasa
eta maldita vaina…”
Aprender a vivir como vampiro era una batalla moral que nadie podía pelear por ella..
Esa sería la última vez que acabaría bebiendo sapos de los canales de riego.
2 comments:
Like this series so far, vamos a ver si la vecina aguanta su situacion...
tendrá que aprender para sobrevivir...
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