Hombre D’ Cobre despertó bajo las ruinas de la destruída
prisión. Asustado removió
los escombros y salió arrastrándose hasta la acera. Era un bonito día soleado.
No había ni unalma en las calles, todos estaban en sus casas escuchando
por la radio
el esperanzador discursodel
gobernador.
los escombros y salió arrastrándose hasta la acera. Era un bonito día soleado.
No había ni un
el esperanzador discurso
Mientras tanto, del
otro lado de la muralla, miles de Zombies, esperaban la señal
para atacar y
destruir la vieja ciudad con todos sus habitantes. Y fue cuando los
malagradecidos
tocaron el tambor de Guerra que comenzó el terremoto.
Un líder
Zombie que calló de su caballo, miró hacía el Puerto de Fantasmas de Piratas
Descuartizados y pudo ver la enorme cabeza de NAPóCOLA, la peor de la bestias,
acabada de levantar y lista para ‘karmar’ todo.
Pronto, las olas de la mar entraron con fuerza golpeándo
las catedrales
y edificaciones coloniales.
Hombre D’ Cobre corrió como
nunca hasta alcanzar el último tren,
así, pudo escapar a las montañas para buscar
a la única persona
que lo podía ayudar. El Indio.
Interdimensional.
Fin de la Primera Temporada,
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